El pasado fin de semana, fiel a su estilo, Jerry Jones le mandó un mensaje a Ezekiel Elliot a través de los medios de comunicación. Tras ser cuestionado en torno a si los Vaqueros podían negociar con mayor tranquilidad con su corredor estelar gracias a la presencia de Tony Pollard en el equipo, Jones simplemente contestó ¿quién es Zeke? Aunque horas más tarde el polémico propietario del equipo de la estrella solitaria aclaró que se trataba de una broma, el agente del corredor no tardó en responder que ni a él ni a su cliente les había causado gracia el comentario de Jones.
Estoy convencido de que en un mundo ideal, Jerry Jones quisiera llegar pronto a un arreglo económico a largo plazo, no solamente con Ezekiel Elliot, sino también con Dak Prescott y Amari Cooper. Y también es un hecho que muchas de las decisiones de negocios trascendentes, tales como la firma de contratos multimillonarios, las toma desde hace tiempo su hijo Stephen.
Aun así, lo dicho por Jones tiene un significado especial. Elliot ha sido un corredor muy productivo y confiable desde su llegada a la liga, y estoy seguro que la mayoría de los fanáticos de Dallas preferirían la continuidad de su corredor titular que la de Dak Prescott. Sin embargo, un corredor es una pieza fácilmente sustituible con una vida útil muy corta, por lo que se antoja complicado que los Vaqueros vayan a hipotecar su futuro con tal de asegurar la permanencia de Elliot en la institución. Dicen por ahí que "entre broma y broma la verdad se asoma", y estoy seguro que lo dicho por Jones no es casualidad. Él sabe que lleva las de ganar y que el dinero que se ahorre en la renovación de Elliot, le será muy útil para convencer a Prescott de firmar un nuevo convenio.
Y es que aunque muchos piensen que los 40 millones de dólares por temporada que pide Dak son una locura, lo cierto es que Dallas no puede correr el riesgo de perder a su mariscal de campo franquicia. Jerry Jones es un viejo lobo de mar y justo por eso se atreve a reírse a costillas de Zeke Elliot, algo que nunca haría con Dak Prescott a quien no "quiere picarle la cresta" ya que sabe que terminarán pagándole una cifra muy cercana a las pretensiones del egresado de Mississippi State.
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