Pese a las predisposición sobre Cruz Azul para juzgarle excesivamente todas las ventajas que pierde, no está tan enfermo como parece en su camino a la Liguilla.
Dos veces le han bajado la guardia a Pumas en el recién terminado torneo regular: el León en el único partido que perdió en todo el calendario y justamente La Máquina, que vio como le dieron la vuelta en el marcador en los últimos minutos.
Cruz Azul terminó entre los primeros cuatro lugares de la Tabla general y no llega enrachado, pero si con un potencial que le permite aspirar a lo máximo.
Pensemos que salvo el León, todos llegan con tropezones importantes a la Fase Final.
Pumas, antes del final de torbellino del sábado, había ganado solamente uno de sus anteriores cinco partidos.
Cruz Azul sufrió derrotas dolorosas contra Monterrey, Toluca y la de esta jornada, mientras que el América debió perder en Ciudad Juárez porque hizo uno de sus peores partidos de la campaña, frente a un adversario que no supo concretar todo lo que tuvo enfrente .
Sin embargo, esa es una de las cualidades de las Águilas: rescatar la victoria cuando merecen el empate o evitar la derrota en situaciones difíciles. Su ADN les ayuda a que aún jugando mal, tienen práctica para escapar de la tragedia.
El recuento tampoco salva del todo a Tigres que cayó en el Azteca frente al América y terminó empatando con el Atlas en el mismísimo Volcán; ni a Rayados, que vio como las mermadas Chivas le dieron la vuelta al marcador que les estaba llevando directamente a los Cuartos de Final.
El descanso motivado por la fecha FIFA incrementa los puntos suspensivos para la definición del torneo, que debe ser emocionante.
Chivas y Necaxa, pese a sus crisis, ahora llegan con más posibilidades de las que se les concedían en el momento crítico de sus campañas.
Pese a que los equipos han sido afectados por lesiones, contagios y la irregularidad que este mundo pandémico nos trajo a todos, se puede esperar un buen nivel de calidad.
Los clubes han hecho un gran esfuerzo.
Volviendo al partido estelar del sábado, la enjundia de Pumas y los remates de Dinenno para terminar su racha de partidos sin gol, los hacen más que dignos merecedores del lugar que ocupan.
Los universitarios sufrieron el partido que sacaron de la hoguera en extremo porque respondieron también ante un momento difícil.
Aunque otros planteles tienen mayor presupuesto y obligaciones, Pumas ha reencontrado su espíritu y alegra con su futbol directo.
Ya no cabe el escepticismo al trabajo de Leopoldo Silva -desde la presidencia-, Chucho Ramírez y Andrés Lillini para hacer brillar con menos a un equipo que la Liga MX siempre necesita fuerte.
León manda, ruge y es el mejor... hasta hoy.
Tendrá que refrendarlo ante una durísima oposición.
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