Hace unas semanas, con la imagen de Patrick Mahomes levantando el trofeo Vince Lombardi concluía la edición LIV del Super Bowl. Aún con la resaca que nos dejó la temporada 100 de la NFL, es un buen momento para hablar del relevo generacional que se está dando en la posición de quarterback.

Durante los últimos 19 años, el dominio de Brady, Manning y Roethlisberger ha sido impresionante. El trío en cuestión ha representado a su conferencia en el partido por el campeonato en 16 de los últimos 19 juegos. Sin embargo, el paso del tiempo y las lesiones no perdonan. Manning está retirado, Brady en la agencia libre y "Big Ben" constantemente lesionado. Otros QB brillantes como Brees y Rivers también se encuentran en el ocaso de sus carreras.

El relevo generacional es inminente. La temporada que recién concluyó, no sólo significó la graduación de Mahomes, con su primer anillo de campeón, y la revelación de Lamar Jackson como MVP. También trajo el surgimiento y consolidación de apellidos como Murray, Allen y Watson. Y con los próximos reclutamientos colegiales como Burrow y Tagovailoa se prevé un futuro interesante.

Parece comenzar una era y un realineamiento de fuerzas en la NFL. La renovación dota de un aire de frescura a una Liga siempre competitiva y espectacular.

 
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