Las negociaciones entre dueños y jugadores están en un momento culminante.

El contrato colectivo de trabajo que se firmó en el 2011 está a punto de entrar en su último año de vida, aunque la intención de las partes es llegar pronto a un acuerdo para firmar un nuevo convenio que entraría en vigor de inmediato, y garantizaría otros 10 años de paz laboral.

Este sería un desenlace benéfico para todos los involucrados ya que, entre otras cosas, sentaría las bases para un nuevo esquema en el que el tope salarial se incrementaría sustancialmente y abriría las puertas para poner en marcha las negociaciones con las televisoras, cuyos contratos con la NFL vencen en el 2021.

Ahora bien, más allá de saber si pronto habrá humo blanco y en qué circunstancias, lo que parece incuestionable es que los fanáticos recibirán buenas noticias.

Los dueños inicialmente querían una campaña regular de 18 partidos, pero parecen haber llegado a un acuerdo con los jugadores para que la temporada tenga 17 encuentros.

Mientras tanto, la pretemporada se reducirá a solo 3 enfrentamientos, y los playoffs tendrán a 14 equipos participantes en lugar de 12.

La semana de comodines será un auténtico maratón en la que se disputarán 6 partidos, y solamente los dos equipos con la mejor marca en cada conferencia tendrán una semana de descanso.

En pocas palabras, habrá más partidos con algo en juego, y menos duelos intrascendentes. Y aunque haya quienes piensen que ampliar la postemporada abre las puertas a la mediocridad, lo cierto es que así como crecen las opciones de que un equipo de medio pelo se cuele a los playoffs, seguirá siendo muy complicado que una escuadra con marca perdedora llegue a instancia definitivas.

Y eso sí, las semanas finales tendrán a muchos más equipos aspirando a calificar, lo que sin duda elevará el nivel del espectáculo en la parte culminante de la campaña.

Ya lo he dicho antes y ahora lo reitero. Los dueños harán hasta lo imposible por aumentar sus ingresos, y los jugadores deberían evitar, a toda costa, poner en riesgo su integridad física con un calendario ampliado.

Sin embargo, desde el punto de vista de los fanáticos y de las televisoras, estas modificaciones serán recibidas con entusiasmo, aun si atentan, en el corto y en el largo plazo, contra la salud de quienes literalmente, se juegan la vida en el terreno de juego.

 
Twitter: @JosePabloCoello