Dicen que lo importante es llegar a la Liguilla con ritmo, embalados y con inercia positiva. Que de nada sirve arrancar la campaña con números relucientes si comienzas a tropezar en la recta final de la Fase Regular.
Cruz Azul parece que lo ha entendido. Después del León, aparentemente inalcanzable para todos, es el equipo con mejor cierre al momento.
En las últimas cinco jornadas, ha sumado 11 puntos de 15 posibles para una efectividad del 73 por ciento. Ha anotado 11 goles y apenas le han hecho 4.
El nivel de eficiencia del Cruz Azul es superior al de Tigres, Necaxa y Puebla, todos ellos con 66 por ciento de efectividad en las últimas 5 fechas. Y mantiene una clara ventaja sobre América y Rayados, que apenas han obtenido el 46 por ciento de los 15 puntos más recientes en disputa.
Por cierto, los de Alonso y los de Herrera son los equipos con peor cierre de torneo de los 8 calificados al momento. Únicas escuadras que presentan dos derrotas.
En el caso de Rayados, preocupante situación por la Final que disputarán ante Tigres, que les habrá de generar desgaste, tensión y distracción.
Cruz Azul avanza sigilosamente de manera sólida. No tiene la presión del torneo pasado. Se despojó de la etiqueta de favorito y del enfermizo estigma del liderato. El equipo se ha liberado. Cuidado.
PARA QUÉ CHIN...
En medio de la euforia, la ansiedad y la emoción por la Final entre Rayados y Tigres que, invade cada rincón de Monterrey, San Nicolás de los Garza, San Pedro Garza García, Apodaca, General Escobedo y hasta de Lampazos de Naranjo, apareció "Tuca" Ferreti con una de esas declaraciones que tienen forma de balde de agua fría.
"Ahorita no hay torneo. Bueno, no hay sede. A ver si se realiza, espero que sí. No vaya a ser que la ganemos y digan que ya no hay (Mundial de Clubes). Para qué chin... jugamos entonces".
La declaración puso a meditar a más de uno, incluido Carlos Salcedo, quien estaba a su lado en la conferencia y que evidentemente no había analizado la batalla desde esa perspectiva.
Pero siendo objetivos y conociendo la devoción de los regios hacia su Clásico, las guturales palabras del "Tuca", impactan poco al verdadero aficionado Tigre o Rayado. Digamos que, con el agua helada y ya empapados, piden más para hacer de todo aquello, un balneario futbolero. Una fiesta con sabor a urgente revancha.
No existe poder humano en la Tierra que pueda arrebatarles la expectativa ni algo que pueda reducirles los nervios por la final que habrá de definir al mandamás de nuestra sui géneris Concacaf.
"Tuca", sin querer, arrojó agua con pastillas efervescentes que han alebrestado e incrementado las emociones.
A los regios les da lo mismo por ahora si hay o no Mundial de Clubes. Ya tendrán tiempo para debatir mientras encienden el carbón y hasta que se consuma el último rib eye.
Twitter: @CARLOSLGUERRERO |