El duelo del próximo domingo entre San Francisco y Kansas City tiene ingredientes de sobra para ser un Super Bowl memorable.

De entrada, se van a ver las caras dos escuadras con larga tradición en la NFL, cuyas aficiones están ávidas de festejar un nuevo título tras décadas de espera. Mientras los Jefes tienen el ataque aéreo más productivo de la Liga, los 49s corren el balón con enorme efectividad.

Y si Andy Reid es una de las mentes ofensivas más reconocidas en las últimas dos décadas, Kyle Shanahan, a pesar de su juventud, se ha ganado el respeto de sus colegas por su brillante trabajo como coordinador ofensivo en Houston, Washington, Cleveland, Atlanta y ahora en San Francisco como head Coach.

Sin embargo, quizás el detalle que más llama la atención es que z ambos equipos son comandados por mariscales de campo jóvenes que desde su llegada a la NFL, no han hecho otra cosa que ganar.

Patrick Mahomes únicamente ha perdido 7 de 31 partidos desde que se hizo cargo de la titularidad, y nunca ha sufrido una derrota por más de 7 puntos. Tan solo en la presente temporada, los tres descalabros en los que estuvo como titular, fueron por una diferencia acumulada de 16 puntos.

Por su parte, Jimmy Garoppolo apenas jugó su primera campaña completa como titular, y como tal, acumula una marca de 21 ganados y 5 descalabros en temporada regular. Y aunque el año anterior sufrió un traspié con diferencia de 11 puntos, justamente ante Kansas City, los tres partidos en los que San Francisco cayó derrotado esta campaña fueron por un total de tan solo 13 unidades.

En pocas palabras, incluyendo los Playoffs, ambos mariscales de campo tienen un porcentaje de victorias combinado de 79.6 por ciento. Son dos tipos acostumbrados a la victoria que saben que aunque están en los primeros años de su estancia en la Liga, afrontan una oportunidad única de enriquecer su legado.

Jimmy Garoppolo y Patrick Mahomes son dos mariscales de campo franquicia por los que Kansas City y San Francisco hicieron apuestas arriesgadas y agresivas. Hasta ahora, ambos han cumplido con creces. Sin embargo, solo uno podrá levantar el trofeo Vince Lombardi la próxima semana en Mitami, y no sería extraño que a partir del resultado del Super Bowl LIV, las carreras de ambos tomen rumbos muy distintos.

 
 
Twitter: @JosePabloCoello