Por primera vez desde la temporada del 2009, los Patriotas se verán obligados a jugar a partir de la semana de comodines.

Luego de una increíble derrota ante Miami, el equipo de Nueva Inglaterra perdió a manos de los Jefes el segundo lugar en la siembra de la Conferencia Americana, y complicó notablemente la ruta de un posible regreso al Super Bowl.

De entrada, Mike Vrabel es un entrenador en jefe que a pesar de su juventud y su inexperiencia en postemporada, conoce muy bien el sistema que ha llevado a Bill Belichick a convertirse en una leyenda viviente.

Además, cuenta con una ofensiva plagada de armas temibles que podría hacer sufrir a una defensa que ha venido de más a menos conforme ha avanzado el calendario. Y aunque es cierto que Tennessee es un equipo mediocre que entró a los Playoffs por la puerta de atrás, aún si los Patriotas consiguieran su boleto para los playoffs divisionales, no parecen tener elementos como para aspirar a ganar de visita en Kansas City y en Baltimore en semanas consecutivas.

Si algo ha distinguido a la era de Belichick al frente del equipo, es la capacidad para ganar los partidos importantes en la temporada regular para poder terminar la campaña con una de las dos mejores marcas de la Conferencia Americana. Fue así, jugando solamente dos duelos de postemporada, que Nueva Inglaterra consiguió llegar nueve veces al Super Bowl y ganó sus seis títulos. Mientras tanto, las únicas tres veces que tuvieron que jugar a partir de la semana de comodines, no pudieron ligar más de dos victorias en una postemporada.

Sin embargo, creo que el mayor reto de Belichick y sus colaboradores a partir de ahora, nada tiene que ver con los antecedentes históricos. El equipo fue incapaz de elevar el nivel para vencer en casa a los Delfines en un duelo crucial y sigue sin tener una identidad a la ofensiva. Además, las derrotas ante Cuervos, Jefes y Texanos durante la campaña regular, dejaron en claro que no pueden depender de los intercambios de balón provocados por la defensiva y los equipos especiales para competir con los pesos completos de la liga.

Reconozco que apostar en contra de Brady y Belichick en postemporada siempre es arriesgado. Pero por lo visto hasta ahora, es más probable una derrota de Nueva Inglaterra ante Tennessee que ver a los campeones representar a la Conferencia Americana en el Super Bowl LIV.

 
Twitter: @JosePabloCoello