Hace muchos años que un equipo "comodín" no consigue llegar al Super Bowl representando a la Conferencia Nacional. Desde que los Empacadores conquistaron la edición LV del Super Tazón venciendo a los Acereros de Pittsburgh, tras haber sido el sexto sembrado de la Conferencia, todos los representantes de dicho sector en el duelo por el título han sido campeones Divisionales. Y desde la final de la temporada del 2011, donde los Gigantes ganaron el título venciendo a los Patriotas en el Super Bowl LVI, ningún equipo que haya jugado en la semana de comodines ha conseguido disputar el título de la Liga.

Esta tarde, mientras San Francisco y Green Bay velan armas y esperan a sus rivales del próximo fin de semana, cuatro equipos entran en acción con la esperanza de poder romper con el dominio establecido por los dos primeros sembrados durante las últimas ocho temporadas. Y aunque será complicado derrotar a 49s y Empacadores a domicilio, creo que hay motivos para pensar en alguna sorpresa, sobre todo si Seattle y Nueva Orleans hacen buenos los pronósticos y avanzan a la Ronda Divisional.

Los Halcones Marinos se quedaron a menos de una yarda de ganar la División y recibir a los Vikingos en casa. Sin embargo, la derrota ante San Francisco los obliga meterse a la complicada aduana de Filadelfia para intentar echar fuera a un equipo que, aún con un mariscal de campo debutante en Playoffs, sabe ganar en postemporada. Mientras tanto, los Santos juegan en casa y no deberían batallar demasiado para tomar venganza de la dolorosa derrota sufrida hace un par de años en Minneapolis ante los Vikingos. Drew Brees y la ofensiva parecen estar pasando por su mejor momento y no creo que la escuadra de Mike Zimmer será capaz de salir con vida del Superdome, sobre todo si Kirk Cousins se ve obligado a ganarle a su contraparte en un partido de muchos puntos.

Seattle ya ganó en San Francisco durante la campaña regular, y aunque su ataque terrestre ha sufrido bajas notables, ya demostraron que incluso así pueden hacer sufrir a sus rivales de División. Por otra parte, aún jugando a la intemperie y en condiciones climatológicas adversas, este equipo de Nueva Orleans parece tener los ingredientes necesarios para poder contra la actual versión de los Empacadores en Lambeau Field.

Reitero: la ventaja de tener una semana de descanso adicional y de jugar en casa siempre será trascendental. Sin embargo, me parece que este año hay las condiciones para que, por primera vez desde la temporada del 2011, algún equipo gane tres partidos al hilo y conquiste el derecho a representar a la Conferencia Nacional en el Super Bowl.

 
 
Twitter: @JosePabloCoello