Dicen la vieja frase, que si no puedes con el enemigo, pues únetele, y algo me dice que la Liga MX comienza a ponerlo en práctica con la MLS.

La fuga de talento del sur al norte, es una realidad, y no solo hablamos de jugadores como Pulido, Pizarro, Ruidiaz, o los regresos europeos de Vela, Jona y Chicharito, también hablamos de directivos y entrenadores importantes como Almeyda, Alonso y Dennis te Kloese.

Nuestro futbol luce indefenso para competir con las comodidades que ofrecen en Estados Unidos y tal vez por eso en los últimos años se ha alejado de la competitividad que brinda el futbol sudamericano y se ha acercado a la MLS, pudiera ser que en un futuro la única manera de seguir viendo en casa a los mejores jugadores del continente, sea a través de la unión de Ligas.

Recientemente se anunció que el 28 de julio del 2020 se llevará a cabo el "MLS All Star Skills Challenge" por primera vez con jugadores de la Liga MX, esto quiere decir que veremos a las máximas estrellas de las dos mejores ligas de la Concacaf frente a frente en un concurso de habilidades similar a la NBA y NFL.

Como era de esperarse, el anuncio causó controversia entre los aficionados que habitan en redes sociales; algunos muy emocionados por el evento y los principales defensores de la Copa Libertadores indignados al ver a sus equipos tan cerca de Estados Unidos, pero tan lejos de Sudamérica.

Seguro que emociona ver a Gignac, Funes Mori, Leo Fernández, Córdova, Carlos Rodríguez y Macías en una prueba de habilidades realizando regates contra obstáculos materiales, pero a poco no sería mejor verlos ante los obstáculos humanos más salvajes de Conmebol.

Debemos ser honestos y preguntarnos qué beneficia más al desarrollo de nuestros futbolistas: competir en escenarios como La Bombonera de Boca y El Monumental de River, o en los modernos estadios de los equipos norteamericanos, jugar sobre pasto que parece alfombra o los "potreros" del sur, lidiar con la presión de las radicales barras del cono sur o la simulación de barras que montan en USA.

Se imaginan a Tigres con sed de revancha tras la Final perdida en River Plate, al América validando en el campo la declaración de Miguel Herrara, al Cruz Azul y las Chivas de vuelta en una Final de Libertadores, al Pachuca defendiendo su historia internacional o al Monterrey validando su dominio en la Concacaf, pero en Conmebol.

Seguro que sí me los imagino, pero también me los imagino montando un show en el mundo alterno de los estadounidenses.

Por los próximos años y mientras los mercados no se redefinen, estoy convencido que México debe pelear por tener lo mejor de los dos mundos; estar cerca de la MLS por razones más comerciales que deportivas, pero no se puede olvidar del beneficio competitivo que logra jugando en Sudamérica.

 
 
Twitter: @AldoFariasGzz