Cuántas veces no hemos sido testigos de las llamadas "injusticias" donde el último en entrar a la Liguilla, donde el más irregular de los calificados y donde el que menos merecía el acceso VIP, termina por dejar fuera al más consistente, al número uno y al que brilló como nadie durante toda la Fase Regular. Historias de éstas, sobran.
Seamos sinceros, nadie puede descartar a Rayados. Ni siquiera Santos. Y eso que el equipo de Almada tiene en sus manos la boleta con las mejores calificaciones. La excelencia que alcanzó durante todo el torneo, no es reconocimiento suficiente para pensar que tendrá una tarea sencilla.
Los diez puntos de diferencia entre los dos del norte colocan a Santos como favorito numérico y favorito en lo futbolístico. Ningún equipo de los clasificados domina tanto su estilo como ahora lo hace Santos. Juegan por nota y podrían hacerlo con los ojos vendados con Gorriarán como el cerebrito del salón y Lozano como el que saca 10 en todo.
Pero... aunque sea el mejor del Apertura 2019, enfrente estará un chico malo que aunque reprobó varias veces y cambió de tutor, tiene potencial suficiente para resolver cualquier ecuación. Su inteligencia no se borra por un semestre irregular.
Será un juegazo.
La llave América vs. Tigres era por mucho la más pareja. Lo era hasta antes de la baja de Nahuel Guzmán. Los felinos no sólo pierden a un portero sino a un líder que catapulta y contiene emociones. Insustituible más allá de sus desquicios. Gignac y Nahuel son por mucho los únicos que pueden romper un bloque de hielo a mordidas.
América no terminó de convencer al 100 por ciento (tomemos en cuenta que es el equipo al que más se le exige) por las lesiones que tanto lo aquejaron a lo largo del torneo. Aún así, el cuadro de Miguel Herrera fue tercero de la general en ocho ocasiones y segundo lugar un par de veces. Más de medio campeonato estuvo entre los tres mejores.
Imposible pronosticar. Ambos tienen individualidades de sobra y además, portan las dos camisetas que hoy por hoy, pesan más en el futbol mexicano. No había un claro favorito hasta antes de lo de Nahuel.
La forma en como Tigres defiende puede ser lo que incline la balanza. Hacerle gol es tan complejo como el trabajo final de la materia más pesada.
León por su parte, parece que tiene ventaja sobre Monarcas. Los de Ambriz no tienen la obligación de América ni la presión de Tigres. No es odiado, es respetado y traen la inercia del torneo pasado. Gran alumno que sin tanto alarde puede desbancar a cualquiera del cuadro de honor.
Necaxa y Gallos han llegado demasiado lejos. Pase lo que pase, la estrella en la frente ya la tienen. Cuidado con Necaxa si sus estrellas vuelven a concentrarse. Si siguen pensando en Chivas, difícilmente trascenderán.
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