El "Tuca" tuvo un discreto debut como técnico de la Selección.

Su equipo, del que probablemente muchos jugadores no serán tomados en cuenta en el partido decisivo contra Estados Unidos, tuvo un funcionamiento totalmente contrario a las características de su estratega.

México fue un cuadro desequilibrado ante Trinidad y Tobago; en la ofensiva se vio bien, pero en la defensiva estuvo fatal.

Pudimos apreciar algunos discretos cambios, tras el primer ensayo.

El Tri tuvo una buena posesión de la pelota, tuvo profundidad por los costados y la actitud me pareció la adecuada.

Defensivamente algunos errores que se dieron por malas decisiones individuales resultaron en un desorden colectivo muy bien aprovechado por los, ya no tan ingenuos, trinitarios.

Volvimos a quedarnos cortos frente a un rival de Concacaf, pero no me atrevo a criticar al "Tuca" Ferretti por ese magro empate.

No es el técnico que más me agrada en el futbol mexicano pero, aunque fuera Pep Guardiola o Mourinho, pensar que desde la banca se puede cambiar radicalmente la cara de un equipo con 2 ó 3 entrenamientos, es algo sumamente complicado, poco probable.

La característica de Ferretti es saber ordenar bien a sus equipos, principalmente en su zona defensiva, y para eso se requiere de tiempo y mucho trabajo, exactamente lo que él no tiene en sus manos.

En verdad lo que estamos viendo es una apuesta desesperada de los directivos de la FMF, que luego de buscar en todos los rincones del planeta y no llegar a ningún acuerdo con los entrenadores con los que platicaron, terminaron quedándose con el que se aventuró a tomar un barco a la deriva.

Para el "Tuca", el partido ante Estados Unidos será el más cómodo de su larga carrera: si no clasifica no tuvo tiempo para trabajar como se debe y si lo hace recibirá una jugosa propuesta que competirá en serio con su palabra de honor.

Pase lo que pase regresará a Tigres, así quedamos, diría Alejandro Rodríguez, presidente de los felinos. ¿Quién le cree a un directivo?

Así les pongo el panorama de lo que pasaría en los diferentes escenarios que tendremos luego del partido contra los estadounidenses.

Si salimos exitosos frente a los Estados Unidos habrá fiesta en la FMF y si "Tuca" es un hombre de palabra tendremos el boleto, pero no tendremos técnico. Es lo mejor que nos puede pasar.

Si fracasamos frente a nuestro archirrival volveremos a no tener entrenador y una cabeza que cortar, me pregunto: ¿los directivos, siendo jueces y parte, se autoculparán y cortarán sus propias cabezas? Eso fue una broma.

Espero que el equipo de las barras y estrellas no salga fino y contundente porque si no logramos la clasificación a la Copa Confederaciones pienso saber quiénes serán señalados como únicos culpables y, les aseguro, no serán los de pantalón largo.

 
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