Por supuesto que la de Javier Hernández no es la transferencia mas importante en la historia de la MLS.

Han llegado a la Liga de Estados Unidos muchos futbolistas en sus 24 años de existencia con una visibilidad global más importante que la que puede generar "El Chícharo" con su arribo al Galaxy de Los Angeles.

Pero ésta sí que puede ser la más oportuna de todas, por la influencia que tendrá en el mercado más importante al que está dirigida esa zona de la Unión americana: la de los mexicanos.

Amplificar una rivalidad ya existente entre uno de los equipos más grandes del país y el incipiente pero importante Los Ángeles FC, con apenas dos años de existencia, es un acierto. Y eso es lo que se logrará teniendo a Carlos Vela de un lado y a Javier del otro.

Con la distancia prudente, puede alimentar algo que en la misma ciudad está ocurriendo con la NBA: el pique entre Lakers y Clippers, que desde el Staples Center ayuda a prender la Liga.

La MLS tiene el suficiente poder adquisitivo para tener reclutados al campeón de goleo de la Liga MX de la temporada pasada, al goleador histórico de la Selección Mexicana y también al futbolista más esquivo y deseado por el Tri, que es Carlos Vela.

Se dice del "Chícharo" que no debió renunciar al futbol europeo y "desperdiciar" su talento en Estados Unidos.

La costumbre que tenemos de desdeñar el "soccer" de los primos del norte nos ha dado ya suficientes sorpresas como para volver a caer en la trampa: la MLS se lo está tomando en serio hace mucho tiempo y le está dedicando a su proyecto el dinero y paciencia que en México escasean.

Javier ha estado más en la banca que en el terreno de juego tanto con el West Ham como con el Sevilla y de ambos clubes salió sin homenajes. El mensaje fue reiterado y constante: no le alcanzó para ser titular.

A Los Ángeles llega como el bien amado. Es un lugar donde lo quieren porque representa un punto de arraigo con el mexicanismo, pero también con una calidad deportiva que a los 31 años debería durarle al menos los tres torneos que durará su contrato.

"El Chícharo" es un jugador más dependiente de la generación de futbol de sus compañeros que Carlos Vela. Sus características de rematador le hacen necesario un equipo que funcione. El Galaxy debe parar un equipo que explote las cualidades del nuevo contratado.

Con todo el derecho a ser feliz y estar donde más a gusto se sienta, desde la óptica mexicana de ambos lados de la frontera este si es uno de los traspasos más importantes de la historia de la MLS aunque para el mundo europeo pasará inadvertido.

Es lo de menos.

Lo importante es llenar estadios, hacer muchos goles y ayudar a construir una Liga que es cada vez más atractiva.

Para Javier Hernández llegó el momento de levantar la cabeza en un sitio que le da dinero y confianza.

 
 
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