Los 49s y los Jefes hicieron buenos los pronósticos, y sin demasiados sobresaltos, consiguieron el boleto para el duelo por el título de la NFL.
Ni los Titanes, que venían de eliminar a Patriotas y a Cuervos, ni los Empacadores, con Aaron Rodgers al mando de una renovada ofensiva, estuvieron a la altura de San Francisco y Kansas City, dos equipos que demostraron tener méritos de sobra para representar a sus respectivas conferencias en el Super Tazón.
En la Conferencia Americana, Baltimore parecía ser un equipo más completo al inicio de la postemporada, pero no hay duda de que la escuadra de Andy Reid alcanzó su mejor nivel a la hora buena.
Además, ya en Playoffs, demostraron que la derrota del año anterior ante Patriotas los preparó para superar las circunstancias adversas que enfrentaron ante Houston y Tennessee respectivamente.
Aunque la defensa sigue sin ser una unidad de élite, el domingo hicieron lo suficiente para permitir que la ofensiva, comandada por la mejor versión que me ha tocado ver de Patrick Mahomes, controlara el partido y sacara a los Titanes de su zona de confort.
Por otra parte, San Francisco ha confirmado, con dos demostraciones de contundencia y versatilidad ante Vikingos y Empacadores, que haber terminado la campaña regular con la mejor marca de la Conferencia Nacional no fue obra de la casualidad.
El domingo, Kyle Shanahan diseñó un plan de juego brillante para explotar la debilidad de la defensa de Green Bay contra la carrera y el partido se definió antes de que terminara la primera mitad.
El Super Bowl LIV tiene, al menos en el papel, ingredientes de sobra para ser un enfrentamiento muy atractivo.
Por un lado, la defensa de 49s, quizás con el frente defensivo más sólido de la NFL y con Richard Sherman en gran momento, buscando neutralizar a una ofensiva en la que Mahomes tiene un impresionante arsenal a su disposición.
Por otra parte, el sofisticado esquema estructurado por Kyle Shanahan y Mike LaFleur, intentando ganarle la partida al experimentado coordinador defensivo Steve Spagnuolo, para tratar de mantener al mariscal de campo rival fuera del campo de juego.
En suma, Jefes y 49s son dos equipos muy completos, bien entrenados y que además, pasan por un gran momento.
Todo esto es una gran noticia para los buenos aficionados a la NFL que hoy se frotan las manos ante lo que seguramente será un duelo apasionante y espectacular.
Twitter: @JosePabloCoello |